Cada persona es un mundo.

No puedes entender a una persona si no conoces su historia y todo la maraña de factores en su complejidad que hacen que un individuo sea hoy lo que es (esto no tiene nada que ver con que te caiga bien o mal, o la quieras cerca o lejos de tu vida, ese es otro tema). Hay personas que tienen su vida encaminada y otras que no (demasiadas cosas que arreglar por dentro y por fuera).

Hay que tomar en cuenta demasiados factores, empezando desde los genes y el temperamento, a las situaciones familiares/geográficas/políticas/económicas/sociales (evidentemente la igualdad no existe a ningún nivel, es artificialidad positiva). No seamos superficiales, a veces sólo queremos ver resultados. Una visión demasiado capitalista de la vida. En tratar de entender hay contracultura y si se puede ayudar en algo es estupendo, siempre que se pueda. A veces el dolor te hace entender mucho más que los pensamientos. Y en la enfermedad, en la debilidad hay vida.